miércoles, 20 de agosto de 2014

MEJILLONES AL VAPOR Y REBOZADOS.

     Ya estamos de vuelta de las vacaciones, perdonad por el parón. Para realizar el periodo de adaptación entre fogones vamos a comenzar con algo muy sencillito, dos formas de preparar mejillones, al vapor y rebozados. Tengo que decir que estos mejillones son los mejores que podemos encontrar en el mercado, directamente cogidos de las bateas de mi querida Ria de Arousa. 
Mejillones al vapor.

Mejillones rebozados.

INGREDIENTES:
  • 1 kilo de mejillones.
  • Tres hojas de laurel.
  • Harina para rebozar.
  • Aceite de oliva.
PREPARACIÓN:

  1. Lo primero que haremos será lavar bien los mejillones con agua fría y quitarle esas molestas barbas de las que están dotados.
  2. Cuando tengamos los mejillones bien lavados los metemos en una olla grande, con tres hojas de laurel. No hace falta que le pongamos agua, ni sal. Cerramos la olla con su tapadera.
    Cociendo los mejillones al vapor.
  3. Los mejillones se abrirán ellos solos con el vapor producido del agua que sueltan en la cocción. Desecharemos aquellos mejillones que se hayan quedado cerrados.
    Cocidos y abiertos.
    Cuando los mejillones estén abiertos los retiramos de la olla a una fuente. Los podemos servir acompañados de limón o mayonesa, lo dejo a vuestra elección.
    Con un poquito de limón.
   Ahora os explicaré como preparar los mejillones rebozados !un verdadero vicio!.

  1. Como ya tenemos los mejillones cocidos en su propio vapor, lo único que tenemos que hacer es sacarlos de su concha y pasarlos por harina. Tampoco hace falta añadirles sal.
    Los pasamos por harina.
  2. Ponemos una sartén con abundante aceite a calentar. Cuando el aceite esté bien caliente incorporamos los mejillones rebozados, dejándolos al fuego hasta que estén bien dorados (el tiempo dependerá si nos gustan más o menos crujientes).
  3. Retiramos los mejillones de la sartén y los pasamos por papel absorbente. Estos mejillones están igual de buenos en caliente, como fríos. 
   Espero que os haya gustado estas dos recetas facilísimas que me han servido para recordar sabores "da terriña".